The mask

El mundo está dañado, enfermo.
La máscara tapa nuestra cara pero no nuestra miseria moral, nuestra decadencia.
La estupidez humana nos sitúa ante un camino sin retorno para el que aún no se ha inventado ninguna vacuna.
Ante semejante panorama, quizás lo mejor sea ponerse la máscara, coger la cámara y dejar volar nuestra imaginación.







































Comentarios